La observación para el análisis del usuario

Hoy venimos hablaros de la observación, como una de las técnicas que usamos en nuestros proyectos de investigación cualitativa en Designthinking.gal, y además es uno de los recursos más utilizados en antropología. Cuando se habla de observación rápidamente se asocia a la capacidad de observar con mucha atención algo o alguien con un objetivo concreto. ¿Es entonces la técnica en sí algo diferente de la acción de observar en general? 

¿Qué es la Observación?

Desde el campo de la antropología es cierto que nos entrenan para ver el mundo que nos rodea con unos ojos y un pensamiento holístico, desde este prisma podemos detectar fácilmente los rasgos sociales y culturales de un grupo de personas. Desarrollamos por tanto una capacidad de absorber información de manera exhaustiva y contextual sobre un fenómeno determinado. ¿Qué significa eso? Vamos a poner un ejemplo, si como antropólogos/as tenemos que estudiar el funcionamiento de una asociación o comunidad de personas, una de nuestras premisas básicas es que realizaremos el trabajo de campo interactuando y conviviendo con ellos. De esta manera podríamos extraer información global acerca del funcionamiento, el código, las costumbres o tradiciones del grupo y es, a su vez, lo que nos daría capacidad de conectar con las propias personas. A esta forma de observar se la denomina, en investigación social, observación participante.

Diferentes tipos de Observación

Diferenciamos dos tipos distintos de observación principalmente. En primer lugar la observación participante, según Jociles (2018) es un técnica de investigación que lleva a cabo el/la investigador/a en un contexto determinado, que consiste en realizar una observación minuciosa recopilando información, sobre el discurso y prácticas sociales de los individuos observados sin que estos se sientan incómodos por ello. Para conseguirlo se suele establecer un acuerdo previo con la comunidad que vamos a estudiar, para poder participar en ella y observarlos sin que exista conflicto. Cuando se pone en práctica esta herramienta, el/la investigador/a suele penetrar en la vida, las actividades y las conversaciones de dichas personas ya sea de forma puntual o duradera en el tiempo, por eso es enteramente participante. 

Por otro lado la observación no participante, se presenta como el instrumento que se emplea para recopilar información sobre el objeto de estudio, sin participar activamente en él o sin formar parte de la comunidad, se usa comúnmente cuando estudiamos el funcionamiento de una web o una plataforma tecnológica como por ejemplo Wallapop, observando a los usuarios cuando interactúan con la tecnología y analizando cómo se da la experiencia.   

Además, la observación es una técnica que se suele usar de forma simultánea con otras, es decir, puede ser que mientras un/una investigador/a esté entrevistando a alguien dentro de una comunidad, a su vez esté realizando una observación de cómo son los sujetos y por ende esté apuntando en el diario de campo notas de todo ello. La antropología en concreto usa técnicas e instrumentos de forma simultánea y complementaria porque intenta realizar un escáner de la realidad, intentando desgranar un fenómeno muy complejo en unidades, categorías o bloques más sencillos y representativos.   

Referencia bibliográficas 

Jociles, M. (2018). La observación participante en el estudio etnográfico de los prácticas sociales. Participant Observation in the Ethnographic Study of Social Practices. Revista colombiana de antropología, 54(1), 121-150.