¿Qué es el co-housing?

Cuando nos planteamos la elección de dónde vivir, se nos abren infinidad de opciones. Solemos decidir si queremos comprar o alquilar, si preferimos una ciudad o un hábitat más rural, en el centro o en las afueras, si optar por un piso o una casa y así un largo etcétera. Vamos eligiendo la vivienda y el entorno en función de las ofertas que se nos presentan, pero por lo general nuestra capacidad de decisión en el proceso es parcial. 

En un momento en el que lo colaborativo, lo co-construido y lo personalizado ha ido en aumento, parece que desde hace unos años le va tocando el turno al co-housing. Sus inicios pueden situarse en la década de los 70 en los países nórdicos y ha tenido un crecimiento continuo y variado desde entonces. Pero, ¿qué es el co-housing? 

El co-housing, una nueva fórmula de vivienda

Este anglicismo se refiere a una fórmula de convivencia que conlleva la autopromoción y la autogestión. En ella, un grupo de personas se unen para crear un proyecto mediante el que diseñan y gestionan viviendas y su entorno: desde las viviendas privadas e independientes hasta las zonas comunes, los servicios de los que se disponen y las actividades sociales que se realizan. Todo el conjunto funciona como una comunidad, que toma decisiones de modo compartido y consensuado. No obstante, el espacio privado de cada persona, su vivienda, es gestionado de manera individual por cada una. 

Cada proyecto se operativiza de manera particular dependiendo de cada grupo de personas y sus necesidades y se puede ir adaptando a aquellas que vayan surgiendo. Además, con esta fórmula se amplía el poder de decisión sobre el dónde, el cómo y el con quién vivir, ya que el grupo puede gestionar y decidir quiénes serán los/as vecinos/as. 

Ejemplos de Co-housing

Tanto fuera de España como en nuestro país encontramos ya numerosos casos de co-housing, por eso solo mencionaremos algunos en este post para que os podáis hacer una idea más concreta de lo que estamos hablando.

Cohousing aflorEM fue desarrollado por 10 personas que sufren de esclerosis múltiple, por lo que todo el diseño de espacios, los servicios a incluir en el proyecto y el estilo de vida giran en torno a las necesidades de estas personas. Un proyecto adaptado que les permitirá vivir con más calidad. 

Cohousing Centro de Mayores Trabensol es otro ejemplo de comunidad creada para un colectivo específico, en este caso hablamos de personas mayores. Se parte de los principios del co-housing que hemos mencionado pero disponiendo de una infraestructura y un personal adecuado para satisfacer las necesidades de estas personas y liberándolas de tareas como lavar la ropa, la limpieza, la plancha… para que puedan centrar en su crecimiento personal. 

La clave del co-housing: la comunidad

Cabe recordar que esta fórmula no se queda únicamente en la parte de compartir espacios, ni siquiera en diseñar tu vivienda y entorno junto a otras personas que compartan valores y estilos de vida. En todo ello, lo definitorio es en sí la propia gestión participativa del proyecto y de las actividades que se llevan a cabo. 

Asimismo, el punto clave de esta fórmula colaborativa reside en las relaciones y lazos que se crean con las personas que forman parte de la misma. Lo compartido, por tanto, tiene como aspecto clave lo relacional. Por ello, la creación de la comunidad y los vínculos de colaboración y el cuidado mutuo, en el sentido más amplio de la palabra, suponen un punto clave para el buen funcionamiento del proyecto. 

En definitiva, el co-housing tiene muchos más matices de los que se pueda intuir en un primer momento y más que compartir una vivienda, se comparte una filosofía de vida. 🙂