Bob Dylan y el nobel de Literatura

Y el premio Nobel del Literatura es para…

El pasado 13 de octubre nos levantamos con una de las noticias que más revuelo causó este año, tanto en redes sociales como en prensa, la elección de Bob Dylan como premio Nobel de Literatura.

Los premios Nobel, otorgados por la fundación Nobel desde 1901, reconocen anualmente a personas o instituciones cuyas investigaciones, descubrimientos o contribuciones son o fueron importantes para la humanidad en las categorías de Física, Química, Medicina, Paz, Literatura y Ciencias económicas. Estos premios llevan el nombre de Alfred Nobel, un ingeniero sueco que se hizo famoso por inventar la dinamita. En su testamento ordenó crear un fondo con su fortuna para premiar a los mayores exponentes en los campos citados anteriormente.

Según esta fundación, Bob Dylan merece el premio  «por haber creado una nueva expresión poética dentro de la gran tradición americana de la canción».

Bob Dylan y el Design Thinking

Los que vinisteis a nuestros talleres ya sabréis por qué escribimos este post en el blog de Designthinking.gal, pero para los que no os lo explicamos a continuación.

La figura de Bob Dylan para nosotros representa mucho más que un cantante al uso o un compositor, es un narrador, un inconformista que quiso cambiar el mundo o un storyteller brillante. Representa además el ejemplo perfecto de cómo aplicar de forma ejemplar el pensamiento lateral en el mundo de la palabra y a la hora de crear historias. Para muestra este genial corte del documental “No direction home” de Martin Scorsese (con el que se realizó recientemente el anuncio de un conocido banco) donde Bob Dylan se inventa nuevas palabras de un modo improvisado, aplicando de manera magistral la técnica del brainstorming al lenguaje.

Aún así ¿creéis que tiene sentido entregar el premio Nobel de literatura a un cantante?

Nosotros creemos que sí, sobre todo si nos remontamos al insight de los premios, al origen de los mismos. Alfred Nobel era un ingeniero, inventor y, aunque no es conocido por esto, también poeta.

Como tal, estamos seguros de que sería una persona innovadora, con planteamientos disruptivos para su época y que pensaba fuera de la caja. Por lo tanto vería totalmente normal premiar a un cantante con esta distinción, ayudando así a derribar los compartimentos estancos en los que vivimos y facilitando que la gente pueda ver, en la época de internet, que todo está interconectado. Al fin y al cabo la obra de Bob Dylan no dejan de ser historias que narran, de forma brillante, un momento histórico y que además están acompañadas de música.